jueves, 15 de agosto de 2013

Realidades alternativas

Hace años, allá por 1995, viajé a Cancún. Allí pasé algo más de una semana realizando diversas actividades y divirtiéndome. Al volver, alguien del grupo con el que había viajado me dijo: "ahora hay que volver a la realidad". Y yo pensé: "¿Qué pasa, que esto que hemos vivido no fue real?"

Pues sí que lo fue. Porque todos vivimos en una realidad, la nuestra. Que no tiene por qué ser la misma realidad que otros.

Lo de las realidades alternativas es cierto, pero no se trata de vivir en distintas dimensiones ni distintos mundos del espacio. Es mucho más sencillo.

Pongamos que una persona nace en el seno de una familia real, crecerá rodeado de lujos y dinero, y con el tiempo pasará a ostentar algún título tipo infanta, príncipe, duque, conde, marqués o incluso a suceder al rey.

Ahora pongamos que otra persona nace en el seno de una familia humilde, sin recursos, sin apenas qué comer. Con el tiempo, sus padres fallecerán y, si esa persona no ha estudiado o trabajado en nada de provecho, o si a causa de una crisis (como sucede ahora) pierde su trabajo y no encuentra otro, terminará en la calle mendigando.

Es evidente que la primera persona no está viviendo la misma realidad que la segunda. Pero los dos son habitantes del planeta Tierra, exactamente iguales.

De la misma forma, cada uno de nosotros vive su realidad, su casa (o la calle en la que duerme), su trabajo (o sus interminables horas en la cola del paro), su familia (o su permanente soledad), pero ¿de verdad esa es la única realidad que podemos vivir?

¿Qué nos impide a muchos de nosotros coger una maleta, llenarla con ropa y algún utensilio más y salir al mundo a buscarnos la vida, a buscarnos otra realidad, en definitiva, a buscar nuestro sitio en el mundo?

Haceos estas preguntas:

¿Estáis en el mejor sitio que podéis estar? ¿Estáis viviendo la realidad que queréis vivir? ¿Qué tendría que suceder para que la realidad se ajustase a lo que vosotros queréis? ¿Qué deberíais hacer para que esa realidad cambiase? ¿Podríais hacerlo? Y en caso negativo ¿sabríais de alguien que pudiese ayudaros a cambiar esa realidad?

Buscad las respuestas a estas preguntas y poneos en acción.

1 comentario: