Soy pesimista por naturaleza. Pero ya estoy harto. Harto de mi pesimismo y del de otras personas que a todo responden: ¡Eso es imposible! ¡Eso no se puede hacer! ¡No te van a dejar! ¡Tú sueñas! ¡Qué más quisieras! y etc...
Estoy harto de frases tópicas como:
Arrimar el ascua a su sardina.
La pescadilla que se muerde la cola.
El chocolate del loro.
Un brindis al sol.
Marear la perdiz.
Estoy harto de que los políticos cambien las expresiones:
A despedir un montón de gente ahora le llaman "expediente de regulación de empleo".
Al enchufe amiguil de toda la vida lo llaman "tráfico de influencias".
A no saber cómo resolver un problema le dicen "hoja de ruta".
A privatizar lo público le llaman "externalizar".
A gente que muere sin tener culpa de nada durante una guerra le dicen "daños colaterales" como quitándole importancia.
Estoy harto de los que siguen votando a partidos manifiestamente corruptos y mentirosos. Probablemente se crean que alguna vez van a pillar cacho. Pobres idiotas.
Estoy harto de los machitos que por tener un cuerpo musculoso y un rostro atractivo se creen que pueden permitirse dominar a una mujer como si fuera un león en el circo que se puede domar a base de latigazos (cosa con la que tampoco estoy de acuerdo, lo de meter animales en el circo).
Estoy harto de las mujeres que se quedan prendadas de un tío porque es musculoso y atractivo y a los pocos meses o años están divorciadas y siendo acosadas por el tío que tanto las atrajo y después las encerró a cal y canto en su casa, además de cargarse a todo tío que siquiera miraba hacia ella. Y esto lo digo por experiencia. Si, harto de ellas porque son incapaces de ver más allá de un cuerpo físico y una actitud estudiadamente bonachona que oculta un sentimiento de superioridad, que más tarde, cuando la mujer ya está "pillada", se manifiesta.
Podría seguir durante mucho tiempo, pero estoy harto de estar harto. Voy a relajarme un poco.
Ooooommmmmm..... (no sé si vale para algo, pero porsiaca, lo hago).
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